Diario de una Mutante - Versión I
Diario de una Mutante - Versión I
Día 1:
Hoy desperté en este lugar en apariencia, muy lejano a mis hermanos y no sé por qué.
Siento que no pertenezco, ni aquí ni allá, no recuerdo mi nombre, mi apariencia me dice
que me nutro de otras tierras. Miro mis manos y no encuentro paridad total. Escucho mi
mente y sólo me llegan reclamos insatisfechos. Para colmo, no recuerdo los últimos
hechos tampoco.
El sentido de supervivencia me indica moverme despacio, lo más sigilosamente posible.
Tanteo a medida que se van produciendo los hechos. No dispongo de tiempo extra.
Las luces del día pasan demasiado rápido, para mi gusto. Si bien todo, es bastante
parecido a mi origen, hay diferencias sutiles. Donde el agua parece tener otros
componentes. Por el presente mi cuerpo parece aceptarla.
Analizo momento a momento los hechos. Debo procurarme un lugar cómodo y seguro,
antes que llegue la oscuridad. Debo admitir que estoy cansada y si bien estoy lejos de
sentir terror, al menos un poco de miedo se filtra en mis pensamientos, supongo que es
natural.
Día 2:
He amanecido con vida, eso es bueno, apenas me asomo, veo que llueve en forma
intensa. Controlé mi inventario y es bastante limitado. Debo buscar abastecerme mucho
antes de lo previsto.
Día 3:
Ya pasaron dos días y no veo nuevos seres vivientes. (Salvo los visto el primer día, muy
fugazmente) esto me preocupa, un poco. Porque sospecho que estaría alejándome de las
zonas pobladas. De todas maneras un poco está bien por el momento.
Día 4:
Camino lentamente desde hace un par de horas, de pronto siento un ruido bastante
fuerte y un desgarro en el piso, mis brazos tratan de aferrarse, a lo que sea, pero nada se
interpone, mis pies no encuentran el suelo, el piso deja de soportarme y he caído al
vacío, no recuerdo cuanto tiempo he estado inconsciente. El pozo es medianamente
profundo, oscuro, frío y espacioso, aparentemente seco. Mis manos se deslizan palmo a
palmo en el entorno. Con una sensación de encontrar algo que quizás no me guste. Pero
no me queda otra, si quiero salir de allí. Uso mi linterna solo, para marcar el camino.
(Que por cosas del azar, no se averió)
Día 5:
Mis raciones de alimento, se han acabado. Sólo me queda muy poca agua.
Día 6:
He consumido toda el agua.
Día 7:
Después de mucho andar, por un camino cada vez más angosto y más bajo sólo encontré
una pequeña vertiente de agua subterránea.
Día 8:
Apenas logro hacer este registro. Sólo sé, que estoy literalmente acabada. No recuerdo
mi nombre. Mis fuerzas me abandonan y hace días que no ingiero alimento alguno. Y el
dolor me puede…
Día 9:
Hemos encontrado a una paciente psiquiátrica, fugada hace 9 días, parece enferma.
Se procede a su traslado y restitución a unidad de origen. CF4 Arian.
♣
Libro: Penumbras en la oscuridad - editado por Tahiel Abril 2016
Día 1:
Hoy desperté en este lugar en apariencia, muy lejano a mis hermanos y no sé por qué.
Siento que no pertenezco, ni aquí ni allá, no recuerdo mi nombre, mi apariencia me dice
que me nutro de otras tierras. Miro mis manos y no encuentro paridad total. Escucho mi
mente y sólo me llegan reclamos insatisfechos. Para colmo, no recuerdo los últimos
hechos tampoco.
El sentido de supervivencia me indica moverme despacio, lo más sigilosamente posible.
Tanteo a medida que se van produciendo los hechos. No dispongo de tiempo extra.
Las luces del día pasan demasiado rápido, para mi gusto. Si bien todo, es bastante
parecido a mi origen, hay diferencias sutiles. Donde el agua parece tener otros
componentes. Por el presente mi cuerpo parece aceptarla.
Analizo momento a momento los hechos. Debo procurarme un lugar cómodo y seguro,
antes que llegue la oscuridad. Debo admitir que estoy cansada y si bien estoy lejos de
sentir terror, al menos un poco de miedo se filtra en mis pensamientos, supongo que es
natural.
Día 2:
He amanecido con vida, eso es bueno, apenas me asomo, veo que llueve en forma
intensa. Controlé mi inventario y es bastante limitado. Debo buscar abastecerme mucho
antes de lo previsto.
Día 3:
Ya pasaron dos días y no veo nuevos seres vivientes. (Salvo los visto el primer día, muy
fugazmente) esto me preocupa, un poco. Porque sospecho que estaría alejándome de las
zonas pobladas. De todas maneras un poco está bien por el momento.
Día 4:
Camino lentamente desde hace un par de horas, de pronto siento un ruido bastante
fuerte y un desgarro en el piso, mis brazos tratan de aferrarse, a lo que sea, pero nada se
interpone, mis pies no encuentran el suelo, el piso deja de soportarme y he caído al
vacío, no recuerdo cuanto tiempo he estado inconsciente. El pozo es medianamente
profundo, oscuro, frío y espacioso, aparentemente seco. Mis manos se deslizan palmo a
palmo en el entorno. Con una sensación de encontrar algo que quizás no me guste. Pero
no me queda otra, si quiero salir de allí. Uso mi linterna solo, para marcar el camino.
(Que por cosas del azar, no se averió)
Día 5:
Mis raciones de alimento, se han acabado. Sólo me queda muy poca agua.
Día 6:
He consumido toda el agua.
Día 7:
Después de mucho andar, por un camino cada vez más angosto y más bajo sólo encontré
una pequeña vertiente de agua subterránea.
Día 8:
Apenas logro hacer este registro. Sólo sé, que estoy literalmente acabada. No recuerdo
mi nombre. Mis fuerzas me abandonan y hace días que no ingiero alimento alguno. Y el
dolor me puede…
Día 9:
Hemos encontrado a una paciente psiquiátrica, fugada hace 9 días, parece enferma.
Se procede a su traslado y restitución a unidad de origen. CF4 Arian.
♣
Libro: Penumbras en la oscuridad - editado por Tahiel Abril 2016
Comentarios